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4 lecciones de educación financiera según Robert Kiyosaki

Según Robert Kiyosaki, autor de “Padre Rico, Padre Pobre”, la educación financiera es la clave para el éxito personal y/o corporativo. 

Las personas exitosas no practican buenos hábitos financieros como un recurso optativo, sino como una filosofía de vida. Es, simplemente, el modo en que los ricos ven y hacen las cosas, según el autor.

Lecciones de «Padre Rico, Padre Pobre»

Los siguientes consejos son extractos del best-seller de Robert Kiyosaki. Quien aplica adecuadamente estas lecciones tiene mejores oportunidades de tener finanzas más ordenadas y comprender que el dinero puede generar ingresos pasivos (que no dependen de nuestro trabajo de modo directo), y de ese modo se puede caminar hacia una independencia financiera.

1. No trabajar para el dinero

Efectivamente, la mayoría de las personas se enfocan en trabajar para hacer dinero, pero el miedo a no tenerlo y el deseo de comprar conducen a un bucle que Kiyosaki llama “la carrera de la rata”. 

A medida que las personas aumentan sus ingresos, usualmente, también elevan sus gastos. Sin embargo, ¿qué pasaría si en lugar de trabajar por dinero, el dinero trabajara para ellos?

Es un cambio de visión. En lugar de recibir dinero por trabajar, se trata de recibir dinero por aprender trabajando y, a posteriori, crear oportunidades de inversión. 

2. Educación financiera

Una de las principales barreras para alcanzar el éxito es la falta de educación financiera. Kiyosaki recomienda aprender los principios básicos de la contabilidad: activos y pasivos, y estar permanentemente estudiando y aprendiendo temas financieros y de inversión.

Los activos generan ingresos y los pasivos generan gastos. Por ejemplo, adquirir una casa para vivir en ella es un pasivo, pero adquirir una casa para venderla o alquilarla (invertir en propiedades) es un activo.

El autor grafica del siguiente modo estos conceptos:

  • Un activo, es aquel que coloca dinero en tu bolsillo.
  • Un pasivo, es aquel que saca dinero de tu bolsillo.

Entonces, él recomienda buscar, incansablemente «activos», por sobre los «pasivos».

3. Busca nuevas oportunidades e invierte en activos

Entonces se debe invertir en activos que generen flujos de ingreso de efectivo, sin que la persona deba dedicar tiempo, día a día, para lograr esos ingresos. Un buen ejemplo de este tipo de activos son las acciones de una compañía que transa en la bolsa de comercio, o el caso de los bienes inmuebles. 

En concreto, si se compra una propiedad usada por un monto X, se invierte otro monto en refacciones y mejoras, y luego se vende en un mayor valor, producto de haber comprado a un buen precio y del valor agregado aportado, es muy probable que se consiga utilidades al momento de vender el bien.

Suena simple, pero el autor recomienda, en este caso, evaluar al menos 100 unidades, presentar ofertas por 20 de ellas, y negociar respecto de las más atractivas, antes de comprar, ya que el negocio acá está más en el valor de entrada que se consiga, que en el valor de salida.

Otro ejemplo es invertir en propiedades para disponerlas para renta. Cada mes se generan dineros pasivos que con el tiempo pueden significar un buen retorno de la inversión. 

En este caso, la clave esta en conocer el mercado de arriendos de la zona donde se haga la inversión, de tal modo de poder ofrecer el producto correcto en dicho mercado, conociendo además los riesgos que puede conllevar este tipo de inversión.

4. Adquiere conocimiento

Ahora bien, ¿cómo puede una persona generar ganancias si no sabe cómo hacerlo, o no tiene todo el capital necesario para el monto de la inversión?

Kiyosaki emplea el concepto del apalancamiento financiero, pues entiende cómo funciona esa ventaja de invertir en el mercado inmobiliario, ya que parte de la inversión se puede estructurar con una deuda hipotecaria.

De modo que, para generar dinero, las personas deben desarrollar su «Coeficiente Intelectual Financiero», es decir, formarse lo suficiente en: contabilidad, inversión, comprensión de los mercados y cómo funciona la ley.

En pocas palabras, para alcanzar el éxito y generar ingresos de forma pasiva hay que educarse financieramente. Esto implica cambiar el modo de ver el dinero y trabajar en lograr finanzas personales sólidas. 

Además, se deben evaluar y conocer los mercados de inversión. Al respecto, el inmobiliario entrega amplias oportunidades de recibir retornos estables en el tiempo.

 

Artículo escrito por Rafael Gana Koporcic / Déjanos un comentario.

Educación financiera

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