Invertir en propiedades en Baltimore, EE.UU., la ciudad más grande de Maryland se ha convertido en un atractivo negocio para las personas que desean rentabilizar su capital. Esto porque ofrece significativas ventajas en lo que respecta al mercado inmobiliario.
Una gran ciudad
Baltimore tiene una economía dinámica, el segundo puerto más importante de la Costa Este, es hogar de más de 600,000 personas y alberga el John Hopkins Hospital, uno de los mejores centros de salud del país y el mayor generador de empleos de la ciudad.
Esto permite prever un crecimiento sostenido en el número de habitantes (de hecho su población millennial aumentó en un 16% entre 2013 y 2018) y, por lo tanto, en la demanda de arrendatarios.
Sumado a ello, es una ciudad satélite de Washington y New York, es decir, muchas personas trabajan en aquellos centros urbanos, pero viven en Baltimore.
De hecho, un informe de Apartment List de 2019, señala que entre 2006 y el 2017, el precio promedio de alquiler en Washington subió un 16.1%, mientras que el salario apenas lo hizo en 9.6%, incrementando significativamente el costo de vida y obligando a muchos de sus residentes a migrar a ciudades aledañas.
Propiedades asequibles
En esta ciudad los inmuebles son relativamente baratos y se pueden conseguir viviendas desde 100,000 dólares, aproximadamente. Sin duda es una de las ventajas más importantes de invertir en propiedades en Baltimore, EE.UU., pues se estima que en 2020 la asequibilidad será un problema significativo en los mercados inmobiliarios de ciudades como Nueva York, Los Ángeles, San Francisco, Boston y San Diego.
La demanda de alquileres será fuerte
El 55% de los residentes de Baltimore alquilan vivienda en lugar de comprarla. Esto quiere decir que, para 2020, habrá más de 331,000 inquilinos en el mercado inmobiliario de Baltimore y, en los próximos años, un número mucho mayor.
Buenos rendimientos
La rentabilidad de casas y departamento en ciertas zonas de Baltimore puede llegar a ser bastante atractiva. De hecho, con una buena gestión, se pueden alcanzar rentabilidades de más del 10%.
Contratos de alquiler de 3 años
Con un buen estudio de inquilinos se garantiza al inversionista ingresos fijos durante 36 meses o una indemnización en caso de que el arrendatario incumpla el contrato.
Hay que aprovechar estas ventajas mediante el Proceso IPP (Income Producing Properties). Este se ejecuta de la mano de un experto y consta de las siguientes fases:
- Investigación y adquisición: se seleccionan y adquieren las mejores propiedades mediante un extenso análisis del mercado inmobiliario de la ciudad.
- Rehabilitación: se realizan las obras locativas adecuadas para dejar el inmueble en plenas condiciones.
- Arrendamiento: se alquila la propiedad, con rendimientos estimados del 10%.
- Administración de la propiedad: la compañía se encarga de recaudar el pago de alquiler, pagar gastos, supervisar reparaciones, etc.
- Propiedad lista para la venta: el inmueble ingresa al sistema para ser ofrecido a los inversores.
Como ejemplo: una propiedad en Kinsey con una inversión de 93,690 dólares puede generar un ingreso anual de 10,437 dólares, es decir una rentabilidad del 11.1% mensual.
Debido a todo lo anterior, las propiedades en Baltimore son una excelente alternativa de inversión, más aún cuando el panorama económico en Chile obliga al inversor inmobiliario a diversificar sus colocaciones para reducir el riesgo de pérdidas.
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Artículo escrito por: Rafael Gana Koporcic / Déjanos un comentario.
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Imagen de Bruce Emmerling en Pixabay
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