En Chile, el precio de las viviendas nuevas es cada vez más alto. De acuerdo con un informe de la Cámara Chilena de la Construcción, su costo ha crecido casi 68% en 8 años, mientras que los ingresos de los hogares solo aumentaron en un 24,7%.
Pero el alza no se refleja únicamente en el mercado de las residencias nuevas. En el segmento de las usadas, el fenómeno también es evidente y significativo, no solo en valor sino en cantidad de unidades comercializadas.
Así va el crecimiento de las ventas de viviendas usadas
Según los resultados de un reciente estudio de la consultora Real Data, en la Región Metropolitana se comercializaron entre enero y junio de 2019, 26.021 unidades residenciales usadas, lo cual representó un alza del 4.1% frente al mismo periodo de 2018. Crecimiento importante, aunque al compararlo con el mismo periodo de 2010 es mucho mayor: 55%.
En valor UF, el crecimiento también es bastante representativo. Entre enero y julio de 2010 se comercializaron viviendas usadas por un valor de 39.7 millones de UF, y durante este 2019 la cifra alcanzó los 96.1 millones de UF. Esto representa un crecimiento del 142%.
El crecimiento de las ventas de viviendas usadas en UF se explica, según el informe, por el incremento en el precio de este tipo de propiedades mientras crece el interés por la compra de unidades de este segmento.
De acuerdo con Patricio Hempel, director ejecutivo de Real Data, «el mercado de propiedades nuevas es sustituto y tiene niveles de oferta de entrega inmediata muy bajos, menores al 10%, lo que deriva en una mayor demanda de las usadas».
Pero ¿cuáles son las causas del incremento de los precios de las viviendas usadas?
En los últimos años se ha generado en las personas una tendencia a pagar –incluso un poco más- por vivir en un barrio bien ubicado, cercano a todo y con acceso a servicios y equipamiento. Se trata de buscar una calidad de vida mejor.
Y en el mercado residencial, la oferta de viviendas ha crecido menos que la demanda, empujando los precios al alza, dado que esta demanda tiene una serie de causas que la impulsan a crecer, como mayores expectativas de vida, nuevas dinámicas familiares y un mayor número de población inmigrante (el número de extranjeros en Chile alcanzó las 1.251225 personas para febrero de 2019).
Por supuesto, la escasez de suelo (que deriva en mayores costos del disponible) y las restricciones en materia de construcción también influyen directamente en el alza de los precios de las propiedades tanto nuevas como usadas.
En todo caso, advierte el estudio de Real Data, si los precios continúan al alza, el área de las unidades residenciales para venta será cada vez menor y muchas personas empezarán a optar por vivir bajo la modalidad de arriendo, que es lo que ha estado observando estos últimos años.
Así las cosas, al momento de decidir comprar una propiedad en una cierta zona, bien vale la pena darle una mirada a las propiedades usadas como alternativa, sobre todo en aquellas áreas donde más se ha contraído la oferta y que en general coincide con zonas donde las viviendas nuevas más han aumentado de valor.
Artículo escrito por: Rafael Gana Koporcic / Déjanos un comentario.
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Imagen de Rafael Gana Koporcic